FOTOS CORTESÍA
Cuando comenzó la cuarentena creímos que el Día del Padre se celebraría normal, es decir, que no sería como con las mamás, a quienes muchos no pudieron visitar por mantenerse en casa. Se pensó que para junio el virus probablemente ya no sería un problema, pero lamentablemente no es así. Seguimos en confinamiento y los casos en esta pandemia siguen a la alza. Al menos, en nuestro Estado.
Sin embargo, los festejos se realizan con “Susana Distancia” y/o con desfiles, en los que se felicita a los seres queridos o amigos, y se entregan detalles con mucho cariño.
El Día del Padre es un buen pretexto para pasar por casa de nuestro querido “viejo”, darle un abrazo a la distancia, y regalarle desde una sesión fotográfica, un día de spa, un tarjetero de piel muy particular o sorprenderlo con un pastel lleno de creatividad.
Los recuerdos viven para siempre
Mientras más se acerca el Día del padre, hay más dudas sobre cómo sorprenderlo. La gente ve muchas opciones de regalo, intenta averiguar qué necesita o qué le gustaría; pero a veces no hace falta algo material.
Céntrate en lo emocional
Cris Villarreal De la Peña, fotógrafa con nueve años de carrera, considera que para encontrar el regalo perfecto para papá es necesario elegir algo que cause impacto, no se pueda olvidar, y conecte con sus gustos y sentimientos, ya sea una actividad, un objeto que pueda usar o incluso considerar una sesión de fotos.
Un detalle como pasar el día con él, practicar deporte, una tarde de juegos, un masaje relajante, preparar su comida o postre favorito o hacer cualquier actividad juntos puede ser suficiente. Todos estos momentos vivirán en los recuerdos, pero hay una manera de conservarlos: a través de la fotografía.
“Es una forma de recordar en un futuro la relación que tenía con sus hijos cuando eran niños o jóvenes, es una forma de congelar el tiempo y poder ver ese momento siempre”, afirmó.
¿Por qué no le regalas una? No importa si los hijos son pequeños o grandes. En unos años se convertirá en una ventana hacia el pasado y podrán revivir esas emociones como si acabaran de ocurrir.
Si ya te animaste, puedes optar por una sesión de Cris Villarreal. Su trabajo es cien por ciento de estudio y se especializa en recién nacidos, maternidad, familias y, en dos temporadas, temáticas de Día de las madres y Navidad.
Cada año su mayor reto es reinventarse, buscar creatividad y crear fotografía novedosa y de calidad. Sus servicios se caracterizan por la experiencia, paciencia, empatía y profesionalismo. Además, su trabajo, en los distintos temas que maneja, lleva la misma línea de estilo y atemporalidad.
“Siempre pienso que las fotografías son recuerdos y tesoros familiares que van a trascender de generación en generación, eso para mí es mi principal motivación, pensar que no solo lo verán sus hijos, sino los hijos de sus hijos”.
“Además, tener la fortuna de hacer el primer retrato de vida de una persona definitivamente me llena de mucho orgullo y agradecimiento”.
Estudió licenciatura en la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UAdeC y ha tomado más de 30 talleres, diplomados y cursos enfocados en distintas áreas de la fotografía, con maestras de reconocimiento mundial como Rachel Vanoven, Alexandra Behr, Bea Pastor, Paola Paz, Paola Carmona y Mónica Olvera. Su último taller fue con la premiada fotógrafa Paulina Duczman, quien se especializa en estilo Fine Art.
Fotógrafo: Martin Phar, Maria Slowinski, Maxim Vakhovskiy y Lola Melani.
Fotografía: recién nacidos, estudio y street photography.
Qué es lo que más le gusta de la fotografía: ¡qué es muy apasionante!
Lo que menos le gusta: puede alejarte poquito de tu familia por el tiempo que le inviertes.
Satisfacción más grande: la lealtad de mis clientes al valorar mi trabajo, estoy muy agradecida con ellos.
Años de carrera: 9 años.
Cámara: Nikon D750.
Lentes: Nikon 50mm, 35mm, 85mm y 100 mm macro.
Luces: Alien bee.
Quién le inspira: Anne Geddes, Annie Leibovitz, Sarah Oliphant y Lola Melani.
Redes sociales: Instagram: @CrisVillarrealFotografia y Facebook: Cris Villarreal Fotografía.
