Tomar clases en línea es muy diferente a hacerlo de manera presencial. No solo por la plataforma, sino porque se deben adaptar las dinámicas de trabajo. Este sistema exige que el estudiante se implique en la adquisición del conocimiento y sea proactivo, pero también puede llegar a ser muy frustrante.
Uno de los principales problemas que enfrentan los alumnos es no disponer del tiempo suficiente, ya sea por exceso de trabajo, una mala organización, o no contar con las herramientas o destrezas adecuadas.
Si sientes que no lograste organizar adecuadamente tus clases el año pasado o no estás satisfecho con tus trabajos, usa algunas apps para hacer de este método de aprendizaje una experiencia más sencilla y agradable.