¿Qué te parecería tener Internet de alta velocidad durante toda la travesía en un lujoso buque? ¿Y que te sirvan tus bebidas un par de robots?
El crucero Quantum of the Seas es un nuevo smartship para los viajes de placer, se trata de un barco que se desliza por el océano ayudado por unas burbujas que él mismo fabrica, y que le ayuda a reducir la contaminación en las aguas por las que navega.
Quantum of the Seas es el ejemplo más moderno de que los viajes en alta mar han dejado de ser un riesgo para convertirse en un placer. Es el primer ‘smartship’ del mundo, o lo que es lo mismo, el primer barco inteligente, y cuyo viaje inaugural tuvo lugar desde Nueva York.
Reservar mesa en los restaurantes con tu cel, utilizar tablets para guiarte a través de este gigantesco navío o abrir las puertas de los camarotes con una pulsera inteligente. Todas las aportaciones tecnológicas posibles valieron para Royal Caribbean cuando la compañía decidió adaptar su nuevo barco a los nuevos tiempos.
Es un barco revolucionario y va a cambiar el modo en que la gente piensa de los cruceros. El Quantum of the Seas es el primer buque en incorporar una conexión sin cable en alta velocidad a través de un satélite, algo que permite a los huéspedes estar conectados a través de sus dispositivos durante 24 horas en alta mar y compartir los recuerdos de sus vacaciones en las redes sociales.
Los viajeros no se extrañarán cuando a bordo les inciten a tomarse ‘selfis’ o a utilizar ‘hashtags’ para etiquetar las fotografías que suban a las diferentes redes.
DISEÑO, TAMBIÉN A LA ÚLTIMA
Esta nueva forma de concebir el espacio del barco adaptado a las exigencias tecnológicas también se traduce en su diseño. Una de las novedades más destacadas es un sistema de navegación en el que el buque se desliza por el océano ayudado por unas burbujas que él mismo crea.
El Quantum tiene plantas depuradoras que limpian el agua antes de introducirla de nuevo en el mar, solo utiliza bombillas LED de bajo consumo y también controla los gases que emana para reducir la contaminación aérea.
Y la modernidad del buque también alcanza áreas tan importantes como la seguridad. Por ejemplo, los mismos brazaletes que los huéspedes utilizan para pagar sus gastos o para ingresar en sus camarotes, sirven para que la tripulación tenga un control de los pasajeros en caso de accidente o incendio.
TECNOLOGÍA Y ENTRETENIMIENTO A BORDO
La finalidad de los viajeros en un crucero es también pasar un buen rato, por lo que este ‘smartship’, no solo consiste en utilizar la tecnología para facilitar la experiencia a bordo, sino también para hacerla más divertida para los clientes que así lo requieran.
Por este motivo, los creadores del barco inteligente apostaron por la utilización de las nuevas tecnologías adaptadas al entretenimiento, que ahora acompañan a figuras tradicionales de la diversión como los deportes y las piscinas.
Sus aliados más extravagantes son P1L y N1C, los dos primeros camareros robots del mundo que también se encuentran en este barco. Los invitados a su bar encargan los cócteles deseados mediante unas tablets que se reparten entre las mesas, y utilizan su brazalete inteligente personal para demostrar su mayoría de edad.
Pero estos robots no están solos, sino que el barco incluye una estación de ‘skydiving’ para deslizarse, propulsándose a través del impulso de unas bombas de aire; una pista de surf que crea olas artificiales y hasta unos autos de choque para los más atrevidos.
Todo para que viajar en alta mar vaya mucho más allá de moverse de un lugar paradisíaco a otro.