Esta actriz nos cuenta en exclusiva parte de su nueva etapa como mamá y su papel en la película Colossal
La cantidad de fans esperando detrás de un enrejado estratégicamente instalado en la puerta de 11 Duncan Street en Toronto, dan una idea de la fama que tiene Anne Hathaway. Los gritos son instantáneos al verla llegar en una camioneta con vidrios polarizados y los infaltables ‘hombres de negro’ guardaespaldas que le abren camino al entrar. Pero ella ni siquiera les hace caso y es la primera en apartar a los guardaespaldas, para saludar admiradores, sacando algunos ‘selfies’ o firmando los eternos autógrafos que se llevan el mejor recuerdo de su fama. Y a puertas cerradas, con un clima mucho más calmado y en un gigante loft del segundo piso, pudimos entrevistarla en exclusiva.
La actriz nació el 12 de Noviembre de 1982 en el vecindario de Brooklyn, en Nueva York.
“Me encantó actuar estando embarazada. Me sentía bien, todo el tiempo. Las hormonas me hacían sentir estupenda y podía llorar cuando quería. Ni siquiera le dije a nadie que estaba embarazada y nada cambió realmente, pero todo lo sentí mucho más dulce y me gustó mucho más.”
– ¿Alguna vez te sentiste incómoda en medio de tanta fama y popularidad?
– Cuando gané el Oscar me sentí muy incómoda. Y no por eso, sino porque todavía lo estaba procesando…
A veces hacemos cosas que no tienen sentido y otras veces ciertas cosas se quedan en nosotros durante un tiempo largo. Quiero decir que yo había perdido la razón haciendo esa película y todavía no había vuelto a mi realidad. Y después, al tener que pararme en frente de tanta gente sentí una felicidad para nada complicada. Parece obvio, porque había ganado un Oscar y se suponía que tenía que estar feliz. Pero yo no me sentí así. Me sentí extraña. Sentí que estaba mal pararme ahí, con un vestido que había costado mucho más de lo que la gente puede ver en toda su vida, con tantas joyas. Y al ganar el premio sentí lo mismo, porque en ‘Les Miserables’ había interpretado el dolor que todavía sigue siendo parte de nuestra experiencia colectiva como seres humanos y no tuve el coraje de decir que no me sentía cómoda. Traté de pretender que estaba feliz. Esa es la verdad. Eso es lo que pasó. Pero estoy contenta que haya pasado, porque aprendí lo que se siente estar adentro de una pecera. Es horrible. Pero también aprendí que tampoco nos morimos de vergüenza y después de un tiempo, todo pasa.
– ¿Quiere decir que no te gustaría experimentar el Oscar 20 veces, como Meryl Streep (19, en realidad)?
– No creo que pueda repetirlo 20 veces porque no soy Meryl Streep. Pero eso no es lo que importa y no le echo la culpa al Oscar. Tampoco le echo la culpa al vestido que costó tanto, ni el valor de las joyas. La culpa fue mía, por no tener la gracia de Lupita Nyong´o cuando ella ganó el Oscar y dijo que tanta alegría personal la consiguió con el sufrimiento de tanta gente. Eso es tener gracia. Y ya no me culpo tanto tampoco, ni la experiencia o los premios. Fui yo. Fue mi forma limitada de pensar. Y para ser justa, también estaba exhausta y mi cerebro todavía se estaba carcomiendo porque me morí de hambre por una película. No lo recomiendo que lo hagas en tu casa. Es un momento que ya pasó.
Para cuando estrenó la primera película ‘The Princess Diaries’, ya la comparaban con una combinación entre Judy Garland, Audrey Hepburn y Julia Roberts.
Mostró un lado más serio como una de las mujeres de los vaqueros gay de ‘Brokeback Mountain‘ con Heath Ledger y Jake Gyllenhaal.
De la mano de Meryl Streep y ‘The Devil Wears Prada’ volvió a recuperar la inocente imagen y entró en el mundo de la moda.
Variando en los estilos de cine pasó por las comedias de ‘Get Smart‘ o ‘Bride Wars‘.
“Hay algo que estoy segura: voy a ser mamá por el resto de mi vida, pase lo que pase… abuela también.”
– ¿De la misma forma que el Oscar te afectó tanto, qué clase de efecto crees que pueda tener tu fama con tu hijo?
– Las madres no tienen ninguna influencia en los hijos. No, no, no, creo que te equivocas, las ‘nannies’ los influencian mucho más. (Risas). Mi hijo va a ser el que me diga en el futuro el efecto que yo tuve con él. Espero tener todos los efectos que los padres queremos tener en nuestros hijos. Espero poder criarlo para ser él mismo.
– ¿Y qué efectos tuvo él en tu caso?
– Una completa regeneración celular. No hay nada que no haya cambiado, pero tampoco quiero entrar en detalles porque me di cuenta que los que tienen hijos ya lo saben y a los que no tiene hijos… No les importa.
– ¿Cambió en algo tu forma de pensar en el trabajo?
– Ya no insisto tanto. Si la filmación de alguna escena lleva mucho tiempo, si veo que algo empieza a ser más lento, enseguida trato de ayudar… Antes que se vaya la luz. Siento que ahora quiero que todo salga mucho más rápido, más fácil, más placentero y tan positivo como se pueda, para poder volver rápido a casa, porque el trabajo ya no significa todo para mí.
– ¿Al momento de filmar la película ‘Colossal’ estabas embarazada?
– Sí.
– ¿Y tus hormonas tuvieron cierta influencia en la actuación?
– El hecho de no haber esperado el embarazo ni ser madre, tampoco sabía cómo iba a reaccionar. Y en el segundo en que quedé embarazada, respiré profundo y ahí me quedé. Fue un sentimiento increíble. Antes había tenido otros rodajes que disfruté filmando, pero con esta película la pasé de maravillas. Me encantó actuar estando embarazada. Me sentía bien, todo el tiempo. Las hormonas me hacían sentir estupenda y podía llorar cuando quería. Ni siquiera le dije a nadie que estaba embarazada y nada cambió realmente, pero todo lo sentí mucho más dulce y me encantó mucho más.
Por el drama ‘Rachel Getting Married‘ fue nominada al Oscar.
Con ´Les Miserables´, Anne Hathaway terminó llevándose el premio a casa, como Mejor Actriz de Reparto.
El mejor premio lo tuvo el 24 de Marzo, conoció personalmente lo que significa un rol tan importante como ser madre.
LA NUEVA APARICIÓN EN LA PANTALLA GRANDE
Con una mezcla del estilo de la película independiente ‘Rachel Getting Married’, la ficción de ‘Alice`s Adventures in Wonderland’ y cierta acción de ‘Transformers’ o ‘Godzilla’, la película ‘Colossal’ sigue los pasos de una mujer, 25 años después de la aparición de un monstruo en el otro lado del mapa, con la curiosa sorpresa de que el personaje de Anne Hathaway quien está detrás de cada paso del mismo monstruo que aterroriza otra ciudad, mientras ella vive otro estilo de terror con el ‘monstruo’ del enamorado, personificado por el mismo Jason Sudeikis que tantas veces quiso matar a su jefe (sí, sí, en otra película, claro).
– Tu personaje de la película ‘Colossal’ me hizo acordar un poco a tu película ‘Rachel Getting Married’ ¿Qué es lo que te gusta tanto de ese estilo de roles?
– Me encantan. En mi vida tengo muchos adictos con los cuales tengo gran afección (Risas, demostrando que bromea). No sé… Supongo que vivimos en un momento donde tomamos mucho más conciencia de los niveles de compasión. Obviamente no pasa en todo el mundo, pero en donde realmente pasa, inspira lo que conseguimos. A mí me apasiona la clase de historia que presenta una oportunidad para mostrar el estigma de un grupo de gente que fue juzgado por algo. Y me gusta entrar dentro de ellos para mostrar el lado humano, porque siento que hay algo de ellos dentro mí, hasta cierto nivel. A lo mejor es el hecho de haber tenido un hijo, pero últimamente siento que quiero que todos sean tratados con amor.
– ¿Y en la historia de ‘Colossal’ qué es lo que más te gustó’?
– Los monstruos gigantes atacando Seúl. Fue muy divertido. Y también el tema de la energía tóxica masculina. No sé si fue algo consciente pero mi di cuenta que el director quiso ponerlo al frente de las escenas.
– El tema de la masculinidad tóxica está llegando cada vez más al cine ¿Crees que pueda generar algún cambio en la sociedad o solo se suma al debate?
– Me pone contenta que lo menciones. También es importante resaltar que la tóxica masculinidad es muy diferente de la energía masculina. La energía masculina es hermosa, es bienvenida, es necesaria. La energía masculina es la gran razón por la que estamos donde estamos. Pero también está la perversión que esa belleza de la energía masculina es el macho ideal y no creo que le sirva al hombre ni a la mujer, no ayuda a la comunicación ni al amor. Y en términos de esta película, creo que la película deja en claro que esa clase de energía ya no tiene lugar en nuestro mundo. Y no deberíamostener miedo. Es emocionante experimentar un futuro donde
podamos explorarlo realmente.
– ¿El rol de productora de cine se complementa en algo con el trabajo de actriz?
– Supongo que el rol de productora ayuda a controlar mi carrera, pero yo siempre lo tomé como una forma de lograr que se vean las películas que quiero que se vean o quiero que se filmen. Yo tampoco pedí el crédito como productora esta vez, creo que me lo ofrecieron por el aprecio de conseguir que se haga. Y me siento orgullosa por esa limitada ayuda que puedo ofrecer, mientras pueda.
– ¿Alguna vez pensaste en un Plan B, qué harías si no fueras actriz?
– Probablemente terminaría en The Voice, con las cuatro sillas sin darse vuelta (Risas) Tomar alcohol es un buen Plan B, también, creo que podría ser una tomadora profesional (no puede parar de reír). No sé, realmente, a lo mejor me gustaría ser líder comunitaria, algo que inspire.
– La película ‘Colossal’ desde el principio acelera de repente 25 años en el tiempo ¿Dónde te imaginas, en tu caso, dentro de 25 años?
– ¿Debajo del agua?
– Tu hijo va a tener 25 años…
– Sí, voy a estar viendo a mi hijo con la boca abierta y a lo
mejor más hijos. Voy a seguir siendo mamá. Hay algo que
estoy segura: voy a ser mamá por el resto de mi vida, pase
lo que pase.
– ¿Y a lo mejor también nietos para ese entonces?
– Sí, a lo mejor, abuela también.
Colossal
En esta película sigue los pasos de una mujer, 25 años después de la aparición de un monstruo en el otro lado del mapa.