La moda puede ser embriagante, más aún si nuestras celebridades favoritas lucen espléndidos cada vez que los vemos en la pequeña pantalla. La mayoría de las producciones audiovisuales actuales proporcionan ideas sobre el glamour y la belleza para que los seguidores del mundo del fashion style disfruten de los mejores vestuarios.
En la actualidad, presumir un outfit como el de las estrellas jóvenes de los shows de TV no es nada difícil, para ello se cuenta con tiendas online como NA-KD, las cuales permiten adquirir piezas de calidad idénticas a las usadas en shows televisados.
Entre las películas y series de TV más inspiradoras para la generación Z de este año destacan: Euphoria, Emily in Paris, Bridgerton, entre otras. Pero, ¿por qué seducen estos títulos a millones de espectadores? Simple, además de mostrar un contenido atrapante, los diseños, el vestuario y el maquillaje de los personajes despejan dudas sobre lo que está de moda en la actualidad.
Euphoria
“Euphoria” influye notablemente en su caudal de seguidores gracias a que reproduce el perfil de los universitarios al momento de hacerse una selfie. Si bien la trama nos conduce a un entorno cargado de sexo, drogas, alcohol, entre otros, las imágenes expresan lo que dicen y visten los jóvenes de hoy.
Según Bivens, responsable del vestuario de la popular serie, los personajes de la producción están configurados para lucir aquello que se pondrían los jóvenes para tomarse una foto.
Rue Bennet (Zendaya) usa una sudadera roja que asemeja mucho a la moda de los noventa, del mismo modo Maddy (Alexa Demie), personaje que viste su vestido de graduación con un diseño parecido al de Rose Mc Gowan en los premios de la MTV de 1998.
Los atuendos al estilo vintage de la serie rememoran la increíble década noventera, si te fijas podrás ver mallas transparentes, conjuntos de top y pantalones a la cadera con tiras y cinturones finos que hacen lucir fantásticos a los protagonistas y con un toque chic que vale la pena imitar.
Emily en París
Si analizamos los oufits de la comedia romántica “Emily en París”, personificada por la actriz Lily Collins, nos daremos cuenta el gran impulso que le ha dado este drama a ciertas prendas de moda. Darren Star comentó que la protagonista de la serie estaba basada en la norteamericana Rebecca Leffler, por lo que introdujo en la trama elementos de la moda, la elegancia y el romance, típicos de la ciudad de París.
La serie profundiza en los looks estrafalarios, el estilismo, la alta costura y la moda, lo que ha hecho que miles de jóvenes se embarquen en la aventuran de verse como sus ídolos, luciendo outfits que definen a la mujer joven moderna.
En las pasarelas y en distintos apartados del audiovisual podrás disfrutar de prendas de vestir de diseñadores y marcas de famosos de la industria textil y la moda como Chanel, Sandro, Kate Spade, Stephane Rolland, Yohji Yamamoto, Rick Owens, Alexandre Vauthier y Off White.
Los Bridgerton
La moda estilo imperio se desempolva de los armarios de Netflix para deleitarnos en esta genial producción de época. Las distintas temporadas de esta serie exhiben un belicoso cambio, sin perder el esplendor de la alta sociedad londinense y el arte glamoroso presente en cada prenda de vestir proverbial.
Del estilo imperio al estilo regencia, la moda se traslada de la sobriedad a la seducción con trajes de corte imperio que delinean la silueta y muestran de forma acentuada o sensual el pecho femenino, a través de corsés y bustiers de la marca Rosario o Dion Lee. Los vestidos de manga corta se complementan con sacos cortos, abrigos largos, capas con capucha y distintas variaciones que dejan perplejos a los fanáticos del glamour histórico.
El vestuario de “Los Bridgerton” no se conforma con exhibir la majestuosidad de los trajes antañones bordados, de mangas farol, agrega accesorios propios de un ciclo que sigue vivo pero con matices distintos, joyas extravagantes, plumas, guantes largos, sombreros exóticos, máscaras, tocados de perlas, entre otros…
Sin duda, una forma creativa de sentir y revivir el furor de la época de la Regencia inglesa, cuando los festejos, bailes y la ropa maximalista, colorida y estampada eran fundamentales para conseguir un buen prospecto para el matrimonio a inicios del siglo XIX.
Inventing Anna
En la miniserie de televisión en streaming de Shonda Rhimes, transmitida por Netflix, el concepto de moda asume un rol preponderante. Los looks de la protagonista Anna Delvey dejan a todos hambrientos a un cambio de estilo, esto porque la audaz timadora de Nueva York se viste, sin aspavientos, para el éxito.
Anna (Julia Garner) se desplaza a Ibiza con un outfit de encanto, vestido rojo de Alexander McQueen ceñido y con vuelo, los accesorios usados para los capítulos demuestran lo mucho que se puede comprar con dinero mal habido.
Pero, además, hace gala de trajes estampados de Dolce y ropa clásica de Oscar de la Renta, Chanel, Givenchy, Prada, Gucci, Valentino y Celine. Bolso Dior, gafas de sol y pañuelos acompañan magistralmente el vestuario de la célebre estafadora que se hizo pasar como una heredera alemana y empresaria.
Do Revenge
“Do Revenge” es una exitosa película de la plataforma de streaming Netflix, dirigida por Jennifer Kaytin Robinson, en la que dos adolescentes buscan vengarse de los acosadores de la secundaria. Por supuesto que el elenco de la producción está equipado con jóvenes talentosos, vestidos con ropa fresca de colores pasteles y marcas comerciales pequeñas.
Alana Morshead y Katie Ballard se propusieron que las estudiantes Drea (Camila Mendes), Eleanor (Maya Hawke), Erica (Sophie Turner) y Tara (Alisha Boe) llevaran atuendos con los que se identifican millones de adolescentes.
Los uniformes del instituto emanan frescura con sus tonos claros, diseñados con faldas a cuadros coloridos, corbatas de lazos, boinas, chalecos, suéteres en lila y verde tenue que aportan una onda chic al contexto.
Para las fiestas o reuniones en sitios cercanos a la piscina, los vestuaristas eligieron conjuntos florales, tops de lentejuelas, camisas de organza, chaquetas y vestidos metálicos, pañuelos, plumas artificiales, bolsos diminutos, cintas anchas de pelo, gafas al estilo “batgirl”, aretes grandes con corazones y figuras geométricas para los personajes populares de la escuela.
Moshead lleva la realidad de la generación Z a su mundo imaginario, donde los personajes recrean varias épocas con sus looks y tienen acceso a las pequeñas marcas o empresas de la moda low cost, así como también a grandes emporios de la élite de la moda, uno de ellos es Chanel.
