
Elegir las llantas adecuadas para tu auto puede hacer la diferencia entre conducir con seguridad o sufrir un accidente.
Tu auto vibra
Si tu vehículo sufre una cantidad inusual de sacudidas tal vez se debe a que tus llantas están desgastadas. Siente tu coche mientras manejas y guíate de tu experiencia para percibir cambios repentinos. Si percibes algo inusual, quizá sea el momento oportuno para cambiar los neumáticos.
Deformaciones o grietas
Los neumáticos antiguos o desgastados suelen desarrollar deformaciones y roturas. Si notas cualquier protuberancia o burbujas, hay que cambiar tus llantas, no dejes pasar este detalle, es extremadamente peligrosos.
¿Objetos extraños?
Es recomendable que antes de subirte a tu coche por la mañana revises que tus llantas estén bien. Inspecciona el desgaste en la banda de rodadura superficial y que no tenga objetos extraños entre éstas, tales como piedras o clavos.
¿El calor afecta las llantas?
Las exposiciones a calores extremos pueden dañar los neumáticos. Parece normal que desarrollen grietas a medida que envejecen o están expuestos a condiciones climáticas extremas, y en ocasiones algunas grietas no requerirán la sustitución de los neumáticos; sin embargo, si notas una cantidad anormal de grietas, puede ser hora de comprar neumáticos nuevos.