EL ROL DE PAPÁ

Las expectativas que tenemos de papá son muchas. Un hombre fuerte física y emocionalmente, con muchísimas cualidades y muy pocos defectos, nuestro protector, líder y superhéroe.

Desde que somos pequeños su imagen nos representa respeto, admiración y orgullo, pues vemos total entrega a sus labores y a su familia.

Papá siempre está trabajando, siempre está en llamadas telefónicas o en su oficina contestando correos, necesita hacerlo para poder pagar las cuentas.

Papá solo puede jugar y estar los fines de semana, con él vamos a pasear, a comer helado y a disfrutar; esa erróneamente creemos que es su misión y su forma de vivir.

Hoy, con otros ojos y en otro tiempo, creo que la imagen del papá debe ser modificada; papá es mucho más que eso, papá es parte fundamental en la vida de los hijos, sin roles, ni estereotipos.

Hoy les quito a mi padre y al papá de mi hija todas las expectativas que la sociedad ha puesto en ellos, los libero de la carga del perfeccionismo, de la fortaleza, de sacar siempre la casta y los invito a que sientan la vulnerabilidad de la paternidad; porque creo que el ser padre es una experiencia maravillosa que va más allá de dar y velar por las necesidades de la familia.

Papá puede llorar, sentirse triste, vulnerable o confundido. Papá no debe de saberlo todo, él también está descubriendo, construyendo su camino y viviendo sus propias experiencias.

Él también tiene debilidades, cosas que sanar, miedos y angustias que no debe cargar en solitario.

Papá es ejemplo, pero no del que hace todo bien, sino el que camina paso a pasito, el que persevera para cumplir sus propios sueños, el que se levanta después de un tropiezo, el que sabe descansar y disfrutar de la vida.

Papá está creciendo, está cambiando y no siempre será el mismo físicamente; sin embargo, lo seguirá siendo para nuestro corazón porque su amor no envejece, no cambia, ni caduca.

A papá se le agradecen los cuentos de la noche, las bromas y sus sacrificios; lo que hizo, lo que hace y lo que no pudo hacer.

Papá ama de muchas formas, demuestra su cariño como él sabe, como a él le enseñaron, como a él le gusta; está bien si no dice mucho, si no comparte tanto sus sentimientos, nada es cuestionable, se siente el amor en sus actos.

Papá tampoco necesita un día especial para festejarlo, todos los días agradecemos a la vida por su existencia y por regalarnos la oportunidad de estar aquí en la tierra.

Felicidades a todos los papás que ejercen su paternidad con amor, sin expectativas y con el corazón.

Gracias, papá, porque has cumplido conmigo, con la familia y con la sociedad. Has formado y educado a 3 hijas con grandes valores y un corazón enorme.

Gracias, esposo, por ser el mejor padre para nuestra hija y por estar siempre para ella.
¡Los amo¡

Mariana Cabello

Mujer apasionada por encontrar un propósito en la vida. Licenciada en Ciencias de la Comunicación. Enamorada de las letras y del sentimiento que provoca el transmitir ideas, expresiones y conocimientos.