Aunque su nombre proviene de la muda de los cuernos de los venados, tiene otros relacionados con las tormentas o la cosecha.
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El verano es la mejor época para pasar tiempo con la familia y hacer actividades juntos, en especial si son al aire libre. Pasen una noche diferente observando la luna llena, este espectáculo de la naturaleza será visible el viernes 23 de julio.
Las tribus norteamericanas tenían distintos nombres para cada una de las lunas, pues medían el tiempo y tomaban decisiones, cómo cuándo sembrar, según sus fases. Los que tenemos en la actualidad provienen tanto de tradiciones de los nativos como de Europa.
A la de julio comúnmente se le conoce como “de ciervo”. Debido a que durante esta época ocurre el desmogue, es decir, los venados mudan sus cuernos en preparación para la temporada de apareamiento. Sus cornamentas crecen más grandes y fuertes conforme se vuelven mayores.
Sin embargo, también se le nombra por otros fenómenos relacionados con animales y plantas: “de muda de plumas”, “de salmón”, “de bayas”, “de frambuesa” o “de mitad del verano”. Así como “de heno”, pues era indicador para comenzar a cosechar, “de trueno”, al ser las tormentas eléctricas más comunes en este mes, o “de hierbas”, cuando se recogían y se secaban para usarse como medicina.
¿Cuál es la próxima?
La luna de esturión, el 22 de agosto.